La mujer más fiel
Así es Mara Barros, el amor de Joaquín Sabina arriba de los escenarios
El cantante y la actriz y se volvieron uno para el otro.Joaquín Sabina siempre se caracterizó por ser un conquistador nato, el arte del encanto lo maneja a la perfección. Sin embargo, de todas, hubo una mujer con la cual tuvo una relación que va más allá del amor y de los sentimientos. Ella es Mara Barros, fiel discípula y defensora del hombre que la llevó a disfrutar de primera mano los beneficios de la fama.
Lo cierto es que la cantante desde muy pequeña estuvo rodeada de grandes artistas, con un padre músico y una madre bailarina, fue construyendo su camino al ritmo y la melodía de las presentaciones y audiciones constantes. La oriunda de Huelva se convirtió en una figura nacional cuando participó del reality show "Popstars: Todo por un sueño", luego lanzó el disco de su gran debut "Dímelo tú" que fue apoyado por estrellas como Pancho Céspedes y Paolo Vallesi.
La onubense siempre cautivó con su histrionismo, capacidad y naturalidad para desenvolverse en los escenarios, tanto es así que la colega del poeta de Úbeda formó parte de los elencos de importantes obras musicales como "Hoy no me puedo levantar" o "Enamorados anónimos", en donde se consagró como la absoluta protagonista.
Respecto a Joaquín Sabina, la intérprete solo tiene palabras de agradecimiento, así lo confesaba hace algún tiempo para "El portal de Galicia": "Cuando me ofrecieron trabajar con él, fue un sueño hecho realidad. Todo ha sido posible porque es una persona muy accesible y es increíblemente generoso. Todo lo que nos enseña, incluso de forma involuntaria, hace que esconda esa parte que mucha gente no ve".
Actualmente, Mara Barros se está luciendo en la "Noche sabinera", junto a sus compañeros de tablas: Antonio García del Diego, Pancho Verona y Paco Beneyto, en equipo interpretan una sucesión de las reconocidas canciones del repertorio del jienense: "Mi público es infinitamente más reducido que el de Joaquín Sabina. Es totalmente diferente. El contar con menos personas me da la oportunidad de interactuar más con ellos, y sentir, de forma mucho más real, lo que estás provocando. Cuando yo salgo con él ante 40.000 personas es una sensación totalmente única.
Cada noche que trabajo a su lado me recuerdo lo afortunada que soy. Nuestra relación es preciosa y muy enriquecedora. Le admiro y le quiero incondicionalmente.