Muchos padres en el mundo llaman a sus hijas "princesa", en el caso del Rey Felipe y la Reina Letizia con la Princesa Leonor (17 años) es en sentido literal. De hecho, esa niña que para ambos es una parte de su corazón está muy próxima a cumplir los 18 años y comenzar una etapa muy diferente en su vida.

Desde su nacimiento, la Princesa Leonor ya tenía prácticamente marcado un destino: convertirse en la nueva Reina de España, aunque para eso aún le quedan muchas cosas por hacer y situaciones para las que prepararse. Dentro de apenas unos meses terminará el instituto educativo de Gales y comenzará un período de formación de vital importancia para su futuro.

De hecho, hace algunos días, se confirmó que la heredera al trono seguirá los pasos del Rey Felipe en este sentido, ya que después del verano va a ingresar en la Academia de Zaragoza, solo el primer paso en una intensa formación militar que tendrá que afrontar. Serán tres años en total en los que estará volcada a ser una más entre los diferentes ejércitos. Un paso realmente indispensable, teniendo en cuenta que, en el futuro, está llamada a ostentar el mando supremo de las Fuerzas Armadas.

La complicidad de Leonor con el hombre de su vida

Por supuesto que para sus padres es imposible no mirar el pasado y sentir un poco de nostalgia por su bebé mayor que ya comienza a abrirse camino en un futuro tan importante. De hecho, para la Princesa Leonor, a diferencia de su hermana la Infanta Sofía, esta formación no es opcional. Justamente, en una reciente visita del Rey Felipe a la facultad de Derecho de la Universidad Autónoma explicó bromeando que esta actividad se veía bastante previsible en los estudios de su hija.

La Princesa Leonor está llamada a ocupar el cargo de Jefa de Estado ya sea por la muerte de su padre o bien por abdicación de Felipe VI, como ocurrió en el caso de Juan Carlos I en 2014. Más allá de esta importante tarea, la complicidad entre padre e hija siempre ha traspasado cualquier protocolo. Por cientos de imágenes que para todo el pueblo terminan siendo una ternura, se puede observar que el Rey Felipe es la fiel sombra de su hija y que entre ellos hay una conexión muy especial.

Los allegados a la corona siempre han confesado que entre el Rey Felipe y su hija mayor ha existido una muy buena relación siempre porque tienen un carácter bastante parecido. Igualmente, desde que él se ha convertido en el Jefe de Estado que esta complicidad y cercanía se ha intensificado, coincidiendo con los años más cercanos a la mayoría de edad de ella. Es una cuestión lógica para muchos, puesto que ya debe prepararla para sus tareas. De todas formas, es imposible negar que se trata de algo que se hace con un cariño que desborda. Desde el otro costado también está la Reina Letizia, que ha optado por esta misma tarea de educar y cercanía con la Infanta Sofía.

Un desplazamiento

Donde es más evidente esta diferencia es durante los actos oficiales, la Princesa Leonor ha pasado a estar muy cerca del Rey Felipe, con notable protagonismo, mientras que la Reina Letizia y la Infanta Sofía quedan en un segundo plano.