Nunca en la vida resulta fácil escoger el camino más placentero para uno, pero eso es todavía más difícil en los clanes en los que parece haber un destino marcado. Ese es el caso de Fran Rivera (49 años), quien proviene de una dinastía de toreros y, por defecto, en su sangre lleva la pasión por la tauromaquia. En ese sentido, Carmina Ordóñez fue responsable, ya que ella también sentía pasión por esa cultura.

Ya han pasado muchos años desde que la también madre de Cayetano partió, pero su persona fue tan representativa para la tertulia que aún nadie la ha olvidado. Su talento era el de ser noticia permanente, simplemente porque su vida atrapaba a los espectadores y quizás allí está la razón de su carácter de incombustible. Por supuesto, mucho tienen que ver con el trabajo que hacen sus hijos para que su legado no se pierda.

Ahora, Fran Rivera goza de mucha estabilidad en lo sentimental y en lo profesional. Su relación con Cayetana (su hija) es estupenda y también con Eugenia Martínez de Irujo, su primera esposa. Está muy enamorado de Lourdes Montes y probablemente a su madre le agradaría ser parte de esta etapa en la que ya no corre riesgos por el camino que escogió para ganarse la vida.

Fran Rivera desoyó el pedido de Carmina Ordóñez

Tal como puede apreciarse en el material de archivo adjunto, que es un fragmento de “Con otro Aire”, segmento que conducía Lolita Flores, allí la hija de “La Faraona” entrevistó a su amiga y tuvo lugar una frase conmovedora, típica de madre. Carmina Ordóñez sentenció que no le agradaba en lo más mínimo que Fran Rivera sea torero. Conocía muy bien la actividad producto de ser hija de quien era, aunque de todos modos no lo aprobaba.

Prefiero que toreen todos a que toree Francisco.

Tal era la angustia que a la televisiva le causaba la idea de ver a Fran Rivera vistiéndose para ir al ruedo que hubiese dado todo para que sus antepasados se enfrentaran al toro y no él. De todos modos, comprendía que esa era su pasión y no estaba en sus planes interponerse en su camino, aunque tampoco ocultaba la poca gracia que le hacía. Seguramente Fran piensa de un modo similar ahora que él también es padre.

Hubiese preferido que sea farmacéutico.

Una figura indiscutida

Carmina Ordóñez fue socialité, relaciones públicas y modelo. Las revistas se peleaban por tenerla como portada y fue una de las principales adversarias de Isabel Pantoja por su amor con Paquirri, el padre de sus hijos mayores.