Hoy, la historia escribe un capítulo diferente para Borja Thyssen (43 años), mucho más amigado con su madre Tita Cervera y siempre incondicional al lado de su esposa Blanca Cuesta. Un nuevo revés judicial podría enmendar esos lazos quebrajados que se deterioraron hace tiempo, aunque no hay que perder de vista que el rencor sigue presente.

Borja Thyssen logró pilotear a la justicia una vez más. Hoy martes su defensa presentó nuevas pruebas y de esta forma, el hijo de la Baronesa esquivó una multa de 1 millón de euros y tres años de cárcel. Tanto él como su esposa Blanca Cuesta pueden respirar una vez más.

Un largo camino

El heredero multimillonario se presentó en el juzgado de lo Penal número 15 de Madrid para enfrentar los cargos por evasión a Hacienda en 2017 por un monto de 336.417 euros. Sin embargo, todo pareció revertirse e incluso hasta su madre ha celebrado la noticia.

Tita Cervera nombró al empresario como el futuro vicepresidente del Museo Thyssen, demostrando que las diferencias del pasado ya serían una cuestión olvidada. Atrás quedaron las polémicas familiares donde las dudas y los reproches estaban a la orden del día.

Amor a prueba de todo

El hijo de Tita Cervera demostró que lo suyo con Blanca Cuesta si iba en serio. Ya con dos hijos y un sólido matrimonio, comprobado está no hay diferencia suficiente que pueda separarlos. Hoy, el matrimonio goza de sus millones heredados y una vida de privilegio que solo unos pocos pueden darse.