Una historia sin final feliz

Así fue cómo el amor y el dolor marcaron para siempre el sendero de Carmen Sevilla

La artista se entregó a un indeseable olvido.
lunes, 8 de marzo de 2021 · 06:00

A pesar de los grandes triunfos que estuvo cosechando desde que iniciara su carrera en el medio, Carmen Sevilla fue capaz de renunciar a todo eso por establecerse al lado del hombre que revivió sus esperanzas en el amor y la acompañó hasta su último respiro: él fue su segundo esposo, el cineasta Vicente Patuel.

La historia de amor entre la sevillana y el empresario empezó poco después de que esta se divorciara del compositor Augusto Algueró Dasca, padre de su único hijo. Durante dos décadas, Carmen y Vicente mantuvieron un sólido noviazgo que daría paso al matrimonio.

Carmen Sevilla en su juventud.

En ese tiempo, la bailarina se dedicó a la vida doméstica y ya no era tan habitual verla brillando frente a las cámaras, sin embargo, solo era cuestión de tiempo para que volviera a su cauce tras una innegable oferta de Telecinco para presentar el programa “Telecupón”, en 1997.

Tres años después, Patuel falleció a causa de un infarto fulminante y Carmen Sevilla tuvo que enfrentarse a su prematura pérdida. A pesar del dolor, ella siempre alegó que la religión la ayudó a encontrar una nueva perspectiva para salir adelante, por lo que tiempo después decidió vender la finca donde vivió con su cónyuge para enfocarse nuevamente en su profesión.

En 2005 fueron publicadas las memorias de la actriz, escritas de la mano del periodista Carlos Herrera. En ese libro, la mencionada relata a corazón abierto cada uno de los eventos que marcaron su trayecto laboral y personal, incluido el deceso de su madre, Flora Galisteo, el año anterior, fecha que coincidió con el nacimiento de su nieto.

Carmen Sevilla y Vicente Patual.

Cuando se encontraba en su mejor momento, Carmen Sevilla debió abandonar inesperadamente el último programa que condujo llamado “Cine de Barrio” en 2010, pues había sido diagnosticada con Alzheimer un par de meses antes, lo que no se revelaría sino hasta 2012.

Actualmente, el padecimiento de la multifacética artista llegó al punto de no retorno y esta no es capaz de recordar a sus familiares, quienes decidieron internarla en una residencia especializada para pacientes con la enfermedad y así velar por su bienestar junto a un grupo de profesionales médicos.  

Más de

Otras Noticias